Los Héroes del X'ondo - La copia española de Titanes en el Ring

X’ondo aparenta ser una denominación antojadiza que pergeñaron los creadores españoles del programa de la TVE Los Héroes del X’ondo, como sinónimo de lucha libre, wrestling o catch. Los luchadores eran x’ondistas y las reglas eran dictadas por La Desfederación Internacional de X’ondo. La palabra no se incorporó al diccionario español y hoy en día una búsqueda en Google, casi no ofrece resultados. Sin lugar a dudas, estos productores habían pasado unas vacaciones en Buenos Aires o habían tenido acceso a los programas de Titanes en el Ring grabados para el exterior en 1978, ya que Los Héroes del X’ondo tuvo una fuerte inspiración en Titanes en el Ring. Algunos miembros del área técnica y artística del programa eran ciudadanos argentinos que vivían en España, algo que posiblemente tuviera que ver con la dictadura militar imperante por entonces en nuestro país. El ciclo comenzó a transmitirse en diciembre de 1978, dentro del programa “Fantástico”, presentado por el animador José María Iñigo. Uno de los responsables de este ciclo fue Willy Rubio. La estructura era un calco de Titanes en el Ring, con luchadores buenos vs. luchadores malos y personajes claramente deudores de la creación de Martín Karadagián, tales como La Momia de Singapur, que se presentaba de idéntica forma que La Momia argentina, luchaba de la misma manera y tenía una especie de segundo a imagen de Joe Galera. 

El Payaso Polvorilla obviamente era un remedo de nuestro Pepino. 

El Justiciero, aunque con máscara dorada, remitía claramente al Caballero Rojo. 

Indio, que ingresaba a lomos de un caballo blanco, hacía de bueno, y recordaba de alguna manera al Indio Comanche. Lo componía el peruano Máximo Aguirre. 

La costumbre de presentar a los personajes con historiales incomprobables también se hizo presente, como por ejemplo para El Ciclón del Caribe, que era el Campeón del Mundo, oriundo de Curaçao y que había ganado el Titulo en Hamburgo en noviembre de 1978. 

Su Campeonato pasó a manos de Mister Fiera, un personaje que ingresaba enjaulado o atado con una correa, emitiendo sonidos guturales y cubierto por una piel de tigre, que solía meterse entre el público y arrojar alguno a distancia (eran maniquíes). A pesar de eso, caía muy bien entre el público y fue consagrado Campéon del Mundo de X’ondo en 1979, poco antes de que el programa saliera del aire, debido a airadas protestas de un sector de la audiencia española, que lo consideraba violento y un mal ejemplo para los niños. Fue interpretado por el luchador español Felipe Calvo, nacido el 26 de mayo de 1937 en Madrid. Se lo había conocido con el nombre de Ursus. Trabajó en westerns filmados en España y también a las órdenes del director argentino León Klimovsky. Fue guardaespaldas del ex-presidente español Adolfo Suárez y del cantante Leif Garrett. Calvo falleció en marzo de 2017. 

Nunca faltan argentinos por el mundo: el réferi, presentado a imagen de los réferis tendenciosos como William Boo o Giardina, se llamaba Mister Rodríguez y no era otro que El Gran Jacobo, Alberto Rossi. Una de las curiosidades del arbitraje en este show era el uso de tarjetas de diferentes colores que significaban diferentes advertencias. 

Entre los x’ondistas estaba El Trampero, un personaje inspirado en Daniel Boone o Davy Crockett (de hecho, entraba con una versión del tema de su serie de TV). Fue interpretado por el luchador argentino Alberto Mercuri, conocido en Titanes en el Ring como Iván el Terrible (1967) y Nino Mercuri (1982). 

Entre los personajes colaterales tampoco faltaba una copia del Hombre de la Barra de Hielo. 

Otros x’ondistas fueron El Robot, encarnado por el luchador Antonio Viñas. Su característica era un traje plateado con capa y gorra, pero luchaba “normal”, es decir sin gestos robóticos. Era manejado por un científico loco, en principio conocido como Profesor Pringus. El actor que lo encarnaba fue reemplazado por Ángel Quesada, y con el tiempo sólo quedó como Profesor. En ocasiones se quedaba sin pilas y no podía continuar la lucha.

Chai Lang respondía al estereotipo del villano chino con coleta. 

Obesus era como un emperador romano tipo Calígula, y su segundo era Claudio, compuesto por el actor argentino Carlos Menghini. Pero también aparecía como segundo de otros personajes. 

Don Salvatore era el típico mafioso italiano, que solía aparecer con varios secuaces que disparaban ametralladoras. Cuando caía al ringside se acercaba una anciana a castigarlo con paraguazos. Fue interpretado por el luchador catalán Josep Adell. 

Punk Tomasín era villano, algo así como un rockero con campera de cuero y anteojos negros, que entraba acompañado con un séquito de chicas. 

Horror Face iba de villano con máscara negra. 

El Hipnotizador Jachín era un faquir que empleaba el recurso de inmovilizar a sus rivales con hipnotismo, algo que en Argentina llegó tiempo después con Cobra el Hipnotizador de Lucha Total (1995) y sorprendentemente hoy en día está usando en México La Momia, de la Arena Naucalpan, en luchas estelares. 

Otro malvado enmascarado fue El Destructor, presentado como originario de Arkansas, Campeón de Estados Unidos en 1974 y 1975. 

El anunciador fue Pepe Yepes, con estilo dinámico y desenfadado. 

Teófilo Calle se desempeñó en los relatos, tratando de brindar una atmósfera de seriedad dentro de lo inverosímil de las acciones. 

Tony Antonio fue un desopilante comentarista y entrevistador a la vera del ring, que acuñó la frase publicitaria “Pastillas Carmona, para no chupar la lona”. Sus reportajes eran decididamente bizarros. 

Marcando las luchas estaban las azafatas o “ring-girls”, que a veces mandaban mensajes inesperados. En el estudio tocaba una banda de música que iba rotando programa tras programa. Algunas costumbres propias de Los Héroes del X’ondo eran: un ritual previo a cada contienda, que consistía en arrojar arroz al público desde una caja de madera para “ahuyentar a los malos espíritus”. Los héroes lo hacían con delicadeza y los villanos con más violencia, contra la gente. Seguidamente golpeaban las piernas sobre la lona en un movimiento similar a los luchadores de sumo. A esto lo llamaban “relajación muscular”. En los primeros episodios los combates fueron a tres asaltos, pero a partir de la cuarta entrega se redujo a uno, por indicación de la “Desfederación Internacional de X’ondo”. Otras modalidades fueron el “X’ondo a Cuatro”: lucha en parejas o lo que nosotros llamamos “Catch Australiano”. Cosas propias de este show, que al cabo todo no fue copia, fueron la lucha de dos contra uno, siempre que el uno superara los 170 kgs., el “Tonto X’ondo”, en el que los x’ondistas competían amarrados entre sí para eliminarse mediante pruebas de obstáculos, 

el “Circus X’ondo”, una especia de cinchada en la que los participantes tiraban de una cuerda y el que se mantenía sin caer en un círculo central ganaba el derecho a luchar, y la lucha de almohadas, que se hacía ya sobre el ring. 

Una vez que el programa, único en su género en la historia de la televisión española, se canceló en abril de 1979, “Los Héroes del X’ondo” se siguieron presentado en vivo hasta fines de ese año.