Legión Nueva Era Argentina en Revista Box y Lucha - México


Legión Nueva Era Argentina.

El pasado 9 de abril se brindó una nueva función de la promoción independiente Legión Nueva Era Argentina, con co-producción de la agrupación El Tope Suicida. Su título fue “Le-Gión and The Masters of the Lucha Libre”, en alusión a la clásica serie de dibujos animados de los ‘80s, “He-Man and The Masters of the Universe”. Fue un vibrante espectáculo con seis combates que mantuvieron en vilo a la afición congregada en un nuevo recinto para Legión: el Galpón B, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina. Con las presentaciones de Ignacio Carmona, se iniciaron las acciones con una “Lucha Scramble” de seis contendientes, que fueron ingresando en este orden: Monsieur Histerie, Zac Monsoon, Valentino, Matt del Mul (acompañado por Taga Santos), MC Killer y Platino, arbitrados por Aníbal. Todos contra todos, se dieron múltiples alternativas y enfrentamientos. Matt del Mul ratificó sus notables condiciones, mientras que el joven Valentino, surgido del Dojo de Legión, demostró una importante evolución. El triunfo finalmente fue para MC Killer, luchador mexicano radicado en Argentina hace varios años. En segundo término, ingresó Francisco Rolón, en la continuidad de una de las historias centrales de Legión, que se viene extendiendo durante las recientes funciones. Rolón se presentó con Juanma Lavolpe, del Tope Suicida, y sus secuaces: Siniestro y Erick Fierro. Una vez más lanzó un reto abierto, respondido esta vez por Romeo Islas y Capuchita. En tal sentido, se derivó en una lucha en parejas: Rolón y Siniestro versus Islas y Capuchita, con Maxi Ledesma como réferi. Con algunas trampas, la victoria fue para Rolón y Siniestro. Tras terminar la lucha, los ganadores siguieron castigando a Capuchita, hasta que llegó a defenderlo su amigo de la Seccional La Plata, Guido el Demoledor. La tercera batalla significó el desarrollo de otra de las historias de Legión: Maikol, ex-Campeón de Legión, venía arrastrando un estado depresivo a raíz de haber perdido el título el año pasado, al tiempo que estaba tratando de consolidar una dupla con el juvenil Gint Giovanna. Enfrente tuvieron a una parte del grupo Némesis, que se viene resquebrajando desde varias fechas atrás. En la ocasión combatieron Terry y Gabriel (nueva identidad del luchador conocido anteriormente como Slovak). Previo al match, Maikol advirtió por micrófono acerca de su falta de motivación y que esta podría haber sido su última vez sobre un ring. Ya en la lucha, la apatía de Maikol obligó a GG a soportar solo el castigo de sus rivales, que se aprovecharon de la situación. Sin embargo, el aliento del público y las circunstancias del combate hicieron que Maikol finalmente dejara atrás su desgano y de repente volvió a luchar como en sus mejores jornadas. De esta manera, la dupla de Maikol y Giovanna se llevó el éxito. Párrafo aparte merece Gint Giovanna, que se desempeñó en gran nivel. Seguidamente, Gabriel atacó a Terry, responsabilizándolo por la derrota y dando por finalizada la alianza de Némesis. A ritmo vertiginoso, se concretó el desafío por la permanencia entre Johnny Fox y Chuck Dixon: el perdedor debía despedirse de Legión. No se dieron tregua los dos guerreros y el triunfo podría haber sido para cualquiera, pero una vez más Dixon falló en coronar su buen trabajo, cayendo vencido. Entre lágrimas, se dirigió al público despidiéndose de Legión. En la semifinal, se enfrentaron Pandemia y Guido el Demoledor, con una estipulación de último momento: la lucha no podría exceder los quince minutos. Pandemia se presentó con sus compañeros de la facción CLS: Full Gas, J-Master y Hunter. Cumplido el plazo establecido no hubo un vencedor, por lo que el réferi Aníbal decretó empate, ante las airadas protestas de los CLS, que lo acusaron de contar con lentitud cuando Pandemia puso de espaldas a Guido en alguna oportunidad. La lucha estelar ofreció la disputa del Cinturón Máximo de Legión Nueva Era, en poder de Ricky Rocca, contra el retador Teo Griffin, quien obtuvo su condición de retador en la función anterior, venciendo a la fuerza a Frankie Legrand, su compañero del grupo Conurbardo. Rocca tuvo el respaldo de su séquito: Francisco Rolón, Siniestro, Erick Fierro y Juanma Lavolpe. La lucha se vio empañada por una serie de circunstancias irregulares: el réferi Ledesma recibió un golpe y quedó al margen. Esto permitió que los amigos de Rocca se metieran a castigar a Griffin. Para inclinar la balanza, ingresó Frankie Legrand a apoyar a Teo. Cuando quedaron otra vez mano a mano, Siniestro se puso una casaca de árbitro y pretendió darle un corte al encuentro. Ante esta situación, su traicionado ex-compañero Platino irrumpió para sacarlo del juego, y él mismo se colocó el atuendo de réferi. Con este escenario, Griffin realizó un arriesgado movimiento y puso de espaldas a Ricky, con Platino convalidando su victoria. Más allá de estas cuestiones, el triunfo de Teo Griffin, un valor en alza, resultó totalmente merecido, y fue celebrado por un amplio sector del público, que lo consagró como un legítimo campeón.

Rafael Daloi


 

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